CARGA DE MUNICIÓN

Asaltada por el aroma de tu varón,
carga de munición mi hembra fébril,
deseo eréctil plantando su bandera,
donde el sentimiento lleva y siente fuerte,
trance ferviente impregnando la piel
del descaro sin mantel servido vivo,
impulsos desinhibidos clareando la noche,
sumando descorches, eyaculando latidos.

Gestada en el útero donde copula lo nuestro,
entrecruzamos fuegos que mojan la cama,
moldeando las llamas, perdiendo el respeto,
impiadoso desenfreno, énfasis del milagro
que, empedernido, ha llegado cual delictivo,
dando a la vida un giro, la vuelta para amarnos,
para no soltarnos...en un síndrome desconocido,
tan tuyo como mío, tan libre de condenarnos.

Posesa del embrujo que nos sedujo hasta suceder,
gozo de enloquecer en las manos de tu voz,
derramada de amor, pasión a punta de latidos,
fuimos al carrusel de delirio a voltearnos el hoy,
donde me eres y te soy, donde somos pan y vino,
cuerpo y  sangre bendecidos en la continuidad,
espiados por el verbo amar, tan nuestro, tan vivo,
pieles enhebrando sus hilos, almas volviendo a hablar.

M.Salguero